domingo, 10 de enero de 2021

Comentario. Después de una gran sequía, viene la gran remojada.

 

Cuando era zagal el nombre de Filomena lo tenían muchas mujeres, pero, aunque había una tal tía Filomena de grato recuerdo, y vecina mía, a la mayoría se le nombraba con el apelativo recortado “Filo” o “Mena”; que esta costumbre ya se daba antiguamente “La Filo y la Mena se han ido a esbandir al lavadero” por ejemplo -se decía-. Yo pensaba que eran dos nombres distintos, pero celebraban “el santo” o sea, la “santa” u onomástica, el mismo día; me imagino que el día de Santa Filomena a la que, según la leyenda, mandó matar el emperador romano Diocleciano porque no quiso casarse con él pues era pagano y más malo que la tiña No sé si ahora las cristianas serán tan escrupulosas como para no casarse con un emperador por no ser del mismo partido, pero entonces parece que sí. Lo de “la maté porque era mía”, parece que viene de lejos.

El nombre de Filomena ha dejado de ponerse a las niñas porque suena a rústico y no gusta a las nuevas generaciones, como ocurre con Blasa, Blas; Tomasa, Tomás; Gueda (Águeda), Quiteria; o Usebio, Usebia (Eusebia), que por cierto es como se llamaba mi abuela paterna. Pero no sería extraño que, sobre todo a raíz de esta nevada, que se considera histórica, se pusiera de moda, como ha ocurrido con nombres que se tienen por rústicos y han vuelto a ser actuales; estoy pensando en Lucas que ya abunda mucho otra vez.

Para quienes creen que solo ha nevado en Samper ahora, les diré que en el año 1956 hubo una nevada escatológica que duró del 2 de febrero al 22 y entonces no había los medios de calefacción que tenemos ahora la mayoría. Y algunas familias con poco recado, aunque las eléctricas han aprovechado el aumento de la demanda para subirnos el recibo de la luz una barbaridad.

Tambien hubo buena nevada el 3 de enero del 1971, la recuerdo bien porque era adolescente y todavía tenía el horno donde estaba muy caliente. Nevaba, se helaba y volvía a nevar encima. Por las cercanías del pueblo se veían algún conejo que lo debía de estar pasando mal. Duró varios días. También hubo nevadas en diciembre de 2001 y diciembre del 2009.



Nuestro presidente autonómico, señor Lambán, es un político muy oportuno, por no llamarle oportunista, que aprovecha que el Ebro pasa por Zaragoza para regalarle el oído a los entusiastas de las pistas de esquí cuando dice que la nieve de las montañas no peligra por el cambio climático (ha recibido miles de críticas), como hace con sus ínfulas anti catalanistas, porque sabe que en Aragón esas soflamas dan votos del populacho aunque irriten a una minoría, pero tampoco creo que tengan razón quienes dicen que la borrasca “Filomena” la produce el cambio climático. Nevadas peores que estas se han registrado en la Historia de España y en Aragón, las grandes sequías también han sido históricas.


No hay comentarios:

Publicar un comentario