La "entente cordiale" entre Arrimadas,
Pablo Iglesias y de los Monteros en el Congreso de los diputados que tanto dio que
hablar y enfado al Rufián, no era casual. Vox y Ciudadanos han justificado su
abstención para evitar que se pacte con los independentistas catalanes y
vascos; incluso con populistas como los regionalistas cántabros o Teruel Existe.
Los acuerdos a los que se ha llegado para la abstención han sido el de eliminar
el Senado, que los presidentes autonómicos se llamen gobernadores, como tiene
que ser (de momento se conforman con eso); hacer el trasvase del Ebro a Murcia
(nunca a Cataluña), y que vuelva a ganar la liga el Real Madrid.
Están de acuerdo con la violencia de
género siempre que no se llame así. Se acepta la subida de las pensiones pero que
sea solo a los españoles y se suba el salario mínimo interprofesional si se
garantiza que lo puedan cobrar también los empresarios. El acuerdo no está
definitivamente pactado y quedan algunos flecos por resolver como la ley de
Memoria Histórica que Vox estaría de acuerdo siempre que no se recordara.
El PP ha criticado estos acuerdos y ha
dicho que solo quedan ellos de derechas (de centro derecha no populista). ERC
no se ha pronunciado, a la espera de lo que pase con Junqueras, pero no parece
probable que apoyen al nuevo gobierno y, sobre todo, no entienden el giro dado
por Pedro Sánchez y Pablo Iglesias cuando era palpable que ellos todavía no
sabían lo que iban a hacer.
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