viernes, 27 de mayo de 2022

Comentario. Muerte en el recreo.

Lo de los asesinatos masivos en colegios, tiene difícil diagnóstico; yo que no soy especialista en la mente humana, o sea, psicólogo, me cuesta entender este tipo de fenómeno que no se han dado nunca en la historia conocida, al menos de manera reiterada; no se dio con los egipcios, ni con los griegos, ni con los romanos, ni con los bárbaros del Norte; ni con la nobleza cristiana ni con la musulmana; ni con los mongoles ni en la China de cualquier tiempo; tampoco en la persa, la indostánica y parece que tampoco en las culturas aborígenes americanas y eso que entre los mayas y los aztecas dicen que los críos iban a la escuela, no se vayan a creer. Mucho menos en la ilustración y en las naciones burguesas de la modernidad o en las democracias populares del este de Europa que como en la China actual o en Cuba todos los colegiales van ordenadicos al colegio y nadie se mueve ni cruza las piernas en las aulas.

Dudo mucho que los psicólogos y psiquiatras sepan de que va la cosa, aunque no faltarán estudios, ponencias, másteres y tesis doctorales, de hecho, ya se ha publicado mucho sobre del tema, pero a nadie le han dado el premio Novel por ello.

Cuando preguntan a la población que se debería hacer para que no ocurran estas matanzas la mayoría de los yankis, sean yankis de verdad o negros, latinos y otras razas inferiores, contestan que lo que hay que hacer es armar a los profesores, o sea, que vayan los maestros y maestras a dar las lecciones con las cartucheras y el revolver o mejor aún, con un fusil de asalto. No lo veo yo.

Pero algún remedio habrá. Es España un tercio de la población tiene armas en casa porque son cazadores y no salen a cazar a la gente por la calle o por los colegios, pero todo se andará; dicen que los EE. UU. son avanzados en la cultura hegemónica mundial y la población europea evoluciona y copia a los americanos (cada vez somos más yankis, idiotas y decadentes). De momento a médicos y enfermeras les pegan cada vez más e incluso han matado a algún sanitario o sanitaria con lo amables y atentos que son (doy cuenta de ello ahora que estoy en un preoperatorio).

Pero si aumentan estos casos habrá que repartir armas entre el profesorado, los funcionarios (cada vez son más acosados también, sobre todo los de Hacienda), y los trabajadores y trabajadoras del Salud (debe ser por los recortes en Sanidad), y que hicieran prácticas de tiro y ejercicios de contrainsurgencia contra insatisfechos, frustrados sociales, dementes y pirados antisistema. Ya digo que yo no lo veo, pero partidos como VOX que están a la vanguardia del pensamiento racionalista en España ya lo propone.

Ya digo que yo no lo veo, pero otra alternativa no se me ocurre. De momento.



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