Hablar del transeúnte
Da mucho
para pensar
Que esconden
sus vidas
Que casi
ninguno quiere explicar.
¿Tuvieron
algún desencanto…?
¿La vida los
maltrató…?
No recibieron
ningún apoyo
El amor los
ignoró.
El ser
humano y su codicia
Se olvidó de
sus problemas
No los
atendió con su calor
Y se ven en
la miseria.
Trotando por
esos mundos
Pasando calamidades
No tener
amparo o familia
Para celebrar
las Navidades
Por eso
sería bonito
Vivir un
mundo lleno de amor
Donde hubiera
un gran respeto
Donde el ser
humano habitara
Entre amor,
ilusión y sin dolor.
Apoyemos al
mendigo
Que su casa
el dejó
No sabemos
sus problemas
Respetemos sus
impulsos
Tal vez la
sociedad le obligó.
María Costán
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