También llamada, vulgarmente, "rompida" |
Reposición de un artículo del 5-4-2017.
El toque del tambor y el bombo siempre se identificó con el pasaje de los Evangelios en los que se dice que: “En esto, el velo del Santuario se rasgó en dos, de arriba abajo; tembló la tierra y las rocas se agrietaron”, versículo 51 del capítulo 27 del Evangelio de Mateo.
El toque del tambor y el bombo siempre se identificó con el pasaje de los Evangelios en los que se dice que: “En esto, el velo del Santuario se rasgó en dos, de arriba abajo; tembló la tierra y las rocas se agrietaron”, versículo 51 del capítulo 27 del Evangelio de Mateo.
Antiguamente
como dicen todas las crónicas, o al menos las leyendas, se hacía
ruido con todo tipo de instrumentos, siempre que fueran de percusión,
incluso cacerolas o coberteras. Con el tiempo quedaron los tambores y
en algunos sitios el bombo o timbal, y las carracas. También las
matracas en sustitución de las campanas. Matracas y carracas han
caído en desuso. En la Semana Santa solo podían tocarse estos
instrumentos, nada de chuflainas ni gaitas; sin embargo, si que se
tocaban cornetas, trompas o cornetines, posiblemente debido a que en
los autos sacramentales se incorporaron las bandas
de alabarderos y encoletados.
La
Rotura de la Hora, que creo que se refiere a la “Hora Santa” en
la que expira
Nuestro Señor, comienza el estruendo, que seguía en todos los actos
y autos, y luego más allá de los actos y procesiones, pues los
cofrades
o participantes pedían permiso para seguir manifestando los ruidos
por el pueblo, ahora ya en una manifestación más profana
que religiosa; de ahí que esta se fuera reglamentando periódicamente para que no se “saliera de madre” e,
incluso, prohibiendo según el humor
de las autoridades eclesiásticas; aunque el brazo ejecutor era
siempre la autoridad civil.
¿Pero
qué es el “velo del templo”?
En
el templo (de Jerusalén), había dos “velos”(cortinas):
uno estaba frente al altar del incienso, a donde los sacerdotes
accedían cada día; el otro separaba
la zona reservada a los sacerdotes de la del Santo de los Santos, en
el que podía entrar sólo el Sumo Sacerdote una vez al año en el
“Día de la Expiación”.
Este último velo fue el que se rasgó.
Para
dar una idea de lo extraordinario del hecho, el historiador judío
Giuseppe Flavio decía que ni siquiera dos caballos unidos a esta
gran cortina, habrían podido romperla. Su mantenimiento era
realmente una
empresa:
tenía
20 metros de altura y diez centímetros de espesor,
para poderla enrollar se decía que eran necesarios alrededor de
setenta hombres.
El
rasgado del velo, que algunos han querido ver el fin de la “Antigua
Ley de Moisés” y la entrada en el Mundo de la “Buena
Nueva”,
el apóstol Mateo une lo extraordinario del evento con un terremoto,
un tipo de eclipses (a pesar del plenilunio de la luna de Pascua) y
la resurrección de los cuerpos de los muertos sepultados. Recordemos
que Jesús muerto, bajó a los infiernos (al Limbo por lo menos), se
supone que bajó su alma, pues su cuerpo mortal estaba en la Tierra, en el
sepulcro, y rescató a todas las antiguas personas pías, incluso
paganas, que hasta entonces no podían haberse beneficiado del efecto
salvador de Jesucristo, puesto que este no se dio a ver hasta el año
1 pero el efecto salvador empezaba entonces, nada más morir, en el
año 33, que es cuando empiezan a madurar las personas aunque sean
divinas como Jesucristo.
La teoría no es mía, pero sobre el hecho de "romper la hora" oí decir que en los evangelios, Jesús dice en alguna ocasión a sus discípulos que aún no había llegado su hora; pero en el Huerto de los Olivos, que es lo que se conmemora la noche del Jueves Santo, y antes de su prendimiento, le dice que despierten (estaban dormidos) que ya ha llegado su hora.
ResponderEliminar"Romper la hora" sería la manera de señalar que ya ha llegado esa hora. Posiblemente sería más correcto decir "irrumpir la hora", y como eso de irrumpir es una cosa muy rara, la religiosidad popular lo convirtió en "Romper la hora".
Claro que tratándose de religiosidad popular vaya usté a saber
Es posible. Quizá gente mayor y de otras localidades de la RUTA sepan porque se dice "Romper la Hora". Yo creo que viene de la liturgia de la "Hora Santa" con lo que tú dices, el rasgado del velo del Templo, los truenos y terremotos que se dice que se produjeron, etc. Hay como una cosmovisión telúrica de tipo religioso que algunos también le han querido dar una visión esotérica al unirlo con la luna de Pascua, el montículo del Calvario y demás. La imaginación es libre y leyendo cosas que se escriben sobre la Semana Santa del Bajo Aragón te encuentras con cosas sorprendentes, aunque luego nadie hace una lectura crítica quizá porque todo que sea ensalzar y exaltar nuestra Semana Santa se considera bueno, aunque se digan a veces, cosas inverosímiles, irracionales o nada rigurosas con la tradición histórica, que también las hay.
EliminarLo de los terremotos, truenos y rasgado de velo del templo coincidió, según dicen, con la muerte de Jesús, no con el prendimiento. Su conmemoración explicaría por qué se toca hasta la tarde del sábado, pero no por que se empieza precisamente en el momento de "romper la hora". Digo yo ¿?
EliminarPues si no sabéis vosotros. Vamos bien.
ResponderEliminarDice que dar golpes a una piel y producir sonidos de tambor lo hacían los Iberos. En todas las celebraciones importantes como la llegada de la primavera..... o prepararse para combatir contra lo romanos. Ya se sabe que los romanos alguna cosa hicieron bien... en este caso lo copiaron y lo utilizaban cuando la armaban en sus guerras civiles... Yo reivindicó que somos Iberos. Luego los visigodos y nos trajeron la religión y.... ya sabemos ... lo que vino luego.