miércoles, 20 de febrero de 2013

Charrada: El estado de la Nación.



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gran Maquiavelo
El primer ministro señor Rajoy no me cae mal, pero su discurso del “Estado de la Nación”, refleja muy bien porque a los políticos los entiende cada vez peor la “ciudadanía”.
Por ejemplo, reconoce que incumplió la mayoría de su programa electoral pero, “porque tuvo que cumplir con su deber”. Es decir, diferencia las promesas electorales del deber a cumplir. Bueno, Maquiavelo, que es el padre y maestro de la política moderna iba por ahí, según creo; luego Rajoy es un buen político.
Lo curioso es que también dijo -según le escuché-, “que en Europa valoran lo que hace porque saben que es un cabal cumplidor de su palabra”. No, es un cabal cumplidor de su deber; porque su palabra no la cumple, como el mismo reconoce. Pero incumple su palabra por cumplir con su deber. (Por cierto esta moral o filosofía es totalmente secular y nada cristiana aunque también la adoptaron los jesuitas,)
La oposición se le tiró a la yugular, como no podía ser de otra manera. Unos con sinceridad, otros con oportunismo, pero la cosa daba para el degüello. Aunque sigue sin entender el que la oposición no le entienda a él y decía perplejo: “no sé de qué se quejan ustedes” (sus señorias). Seguramente está convencido de que habrían hecho lo mismo. O sea, que, los de la oposición, también habrían sido buenos políticos ¡No sé para qué tanto debate¡ Si todos son discípulos de Maquiavelo.
Nicolás Maquiavelo.  "desde hace un tiempo a esta parte, yo no digo nunca lo que creo, ni creo nunca lo que digo, y si se me escapa alguna verdad de vez en cuando, la escondo entre tantas mentiras, que es difícil reconocerla” (carta a Francesco Guicciardini, mayo de 1521).

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