domingo, 1 de noviembre de 2020

Charrada. La imposibilidad de cerrar una ciudad.

 

La gran extensión del término de Zaragoza y la tupida conexión de los accesos dificultan la tarea

Es imposible controlar los accesos; lo único que puede disuadir es tener mala suerte, te toque la policía o la Guardia Civil y te peguen un multazo. 

El término municipal de zaragoza es muy grande, disperso e incluye términos rurales muy poblados. Ya se hacen chistes entre los de Utebo y Cahetas; los primeros no pueden ir a "Cahetas", que solo los separa una calle, pero pueden ir a Monzón que está en otra provincia. Y viceversa. Uno de  "Cahetas" que tenga la novia en Utebo no puede ir a festejar a ese pueblo. Por si acaso no vengáis a "Cahetas" ni al resto de Zaragoza, que está maldita. Los que nos hemos quedado cautivos en Zaragoza incluidos sus barrios rurales, tampoco nos debemos mover fuera; mas que nada por si acaso hay un control (que siempre están donde no hace falta). Tampoco los críos deben preocuparse por los regalos de Navidad de los tíos o abuelos, pues como son magos y de la casta política, pueden entrar y salir por todos lados. El Papa Noel o Santa Claus, si cierran las fronteras nacionales, ya lo tienen peor porque además como son protestantes no son magos.



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