martes, 22 de agosto de 2017

Comentario. Maceteros contra el terrorismo yihadista.

Madrid recupera los
bolardos anti-yijadistas
          El Ayuntamiento de Zaragoza debe decidir en las próximas horas dónde, cómo y cuándo coloca maceteros y bolardos en las zonas más concurridas de la ciudad que puedan ser objeto de atentado terrorista mediante coches, camiones o furgonetas que arrollen a los peatones. El pasado viernes, la Junta de Seguridad estableció la necesidad de colocar aquellos elementos necesarios para evitar atentados como los de Barcelona y Cambrils del pasado jueves o los ocurridos anteriormente en Londres, Berlín o Niza. La colocación de bolardos puede dificultar el acceso de servicios públicos (por ejemplo, Bomberos), a algunas zonas. Por ello es necesario analizar bien las medidas que se adopten para garantizar la seguridad. 

          Además de la dificultad de actuación de los bomberos, también dificulta a las ambulancias; lo mismo, muchas calles de afluencia turística o comercial son semi peatonales, que permite el acceso de vehículos de vecinos residentes o de carga y descarga, o tienen permitido el tránsito en algún cruce (como puede verse en la calle Alfonso) que baja hasta la Plaza de las Catedrales. Hay también trayectos ciudadanos, tanto en las ciudades como en los pueblos que se cortan provisionalmente para cabalgatas, procesiones, manifestaciones y eventos festivos en los que es necesario facilitar el tránsito de la policía, protección civil, cruz roja, montadores; las ferias y accesos a las ferias, etc. Es un tema difícil de afrontar sin que el remedio no sea, a veces, peor que la enfermedad y por supuesto, nunca a gusto de los que salen perjudicados, por ejemplo; los residentes en esa zona, los feriantes, los comerciantes, las grandes superficies. 

          Las restricciones de automóviles por los cascos antiguos y la racionalización de la movilidad urbana de las ciudades y pueblos por cuestiones de seguridad casi siempre están mal vistas y mal toleradas por los vecinos, y los munícipes "pasan" de ello para no quedar mal con los votantes y cuando no "pasan" se les echa encima todo el mundo, la oposición municipal y la prensa si no es de su "cuerda".

          Pero los alcaldes y concejales de pueblo pueden ser acusados de facilitar los accidentes o de colaborar en los atentados terroristas si prospera la denuncia y recogida de firmas para que se impute a la alcaldesa de Barcelona como copartícipe del terrorismo yihadista. Por no poner maceteros. Por otros motivos a otros políticos también se les pide llevarlos a la cárcel por tolerar o permitir la venta de armas a los países emergentes musulmanes, como los de las “burguesías árabes del Golfo” y Turquía, que financian a los terroristas (cosa que por otra parte es verdad), pero ¿deben los políticos ser responsables, no solo políticos, sino penales, de que a mí me coja la baquilla si salgo a recortarla o me explote un “güete en la cara” si me lo tira un gamberro?, Parece ser que si.
           A este paso solo serán alcaldes y concejales los que elija el señor gobernador militar; porque ninguna persona normal y en sus cávales querrá meterse en política. Ya lo decía Franco “hacer como yo y no os metáis en política”. La corrupción de las élites políticas (que hay que reconocer que es muy grande), y el sectarismo secular, demagogo y miope de la ciudadanía sobre la política (ya tod@s somos especialistas y sabemos cómo eliminar de raíz el terrorismo yihadista), conseguirá que la gente sana y normal, que son la mayoría de nuestros concejales y alcaldes de España, no se metan en política. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario