Comentario. Fiestas y Festejos de Primavera en honor de Santa Quiteria.

          Hacer un análisis imparcial de la pasadas fiestas de Santa Quiteria es algo muy difícil porque depende de cada cual; de su estado de ánimo en esos días, también de las simpatías que tenga hacia el equipo de gobierno del ayuntamiento de la Villa (responsable último de los eventos), que puede ir desde el amor encendido y pasional; el seguidismo acrítico, la simple cordialidad, la indiferencia, la antipatía, la fobia mal disimulada o la tirria. Yo intento estar en el término medio que siempre digo que no existe, porque el término medio de las cosas es lo que cada uno de nosotros considera que es lo correcto, o sea, el tan buscado y difícilmente encontrado sentido común

          Aunque soy relativista tengo mi escala de valores, como todo el mundo y por lo tanto mi sentido común a veces no coincide con el sentido común de la mayoría. Digamos, por lo tanto, que mi término medio sobre la valoración de estas fiestas está en la simple cordialidad hacia el Ayuntamiento, e intento desechar la indiferencia, la antipatía, la fobia o la tirria; pero también desecho el amor apasionado hacia el equipo que dirige el consistorio o el seguidismo que anula la capacidad crítica. Aparte, claro está, que han participado muchas personas más que no son los concejales y el alcalde, pues son muchos los colectivos involucrados y personas particulares sin los cuales no habríamos tenido fiestas; unas fiestas cordiales.

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          En líneas generales las jornadas y fiestas de primavera me han parecido bien; las esperaba peor porque soy pesimista, los tiempos vienen mal dados para gastos suntuosos y nuestro pueblo (como la mayoría de Aragón), está en horas bajas. Sin embargo he disfrutado; porque salir satisfecho por haber pasado unos días felices en mi pueblo es una gozada y no tiene nada que ver con estar dando saltos de alegría. Los que han trabajado en ello, Ayuntamiento, Asociación de mujeres o Amas de casa; Club de tiro, de Futbol, Ciclistas, Cachirulo, Cofrades, expositores de la feria, ganaderos, trabajadores y ayudantes, y no sé si me dejo alguno, merecen una felicitación.

           Como crítica, algunas cosas; algo que no entiendo seguramente porque me estoy volviendo viejo; se trata del chun-chun hasta las cinco o seis de la madrugada, ¿cómo es posible que haya gente que le guste esa aberración de la música y de los sentidos? Para Santo Domingo nos espera un tormento mayor de varios días; digo días, noches; pero en fin, no todo puede ser a nuestro gusto, yo también tengo mis manías.

          Hay quien critica la comida de los feriantes y expositores en la ermita; yo creo que es normal que el Ayuntamiento agasaje a expositores, ganaderos y personal con una comida. Tampoco me importan otros gastos por eventos del pueblo en los que yo no participo siempre que se ajusten al sentido común (ya me ha salido esta palabra). Más me preocupa lo del sitio donde se celebra la lifara (yo también he participado con amigos en algunos festejos en el claustro de la ermita). Pudiera ser que peligren las pinturas porque en este pueblo la sensibilidad que tenemos por la conservación del patrimonio histórico es muy pequeña. Nos gusta lo nuestro, sí, y lo queremos mantener, pero confundimos la reforma con la restauración, que no son la misma cosa.

          Si desaparecen las pinturas del claustro, que a la mayoría creo que les importa un comino, habrá desaparecido un legado aunque se podrá remozar el claustro con otras más monas y menos tétricas. Se pueden pintar otras cosas de estética moderna. Más se perdió en Cuba. No me gusta que se pierda legado artístico pero a estas alturas de mi vida no quiero ejercer de aguafiestas, así que “cada palo aguante su vela”.

          La “Semana Cultural”, muy buena. Es difícil mantener un evento de estas características con tan poco dinero, además varios de los ponentes han sido samperinos lo que es para sentirse orgullosos. Yo solo falte a dos: la dedicada a la Virgen María, cuya vida y milagros “melasedecarretilla”, aunque dudo de lo del embarazo por el Espíritu Santo (la duda es buena “Ser o no ser, he ahí la duda”), y la de la “convivencia en pareja”. Pensaba que, esta última, se iba a prestar más al morbo que a la ciencia. Estaba equivocado, me han dicho todos a los que pregunté que fue la mejor charla o, por lo menos, la que más interés despertó de la jornada cultural.

          La charla de Pablo Lorente me ilustró, pues apenas sabía nada de los premios nacionales de poesía. Tengo que reconocer que la poesía de las últimas décadas no me conmueve; solo se expresa en prosa. Me resulta muy difícil entender como poesía algo que me suena muy lírico y sentimental, pero no lo veo como poesía. No rima (no pega, que decíamos en Samper) y además, con frecuencia, no les cojo lo que quieren decir los poetas estos de ahora. Con lo sencillo que son Machado y García Lorca o Miguel Hernández; pero también Bécquer, Juan Ramón Jiménez, Quevedo o incluso Calderón y Góngora. Se nota que estoy desfasado.

          La charla que le siguió, de D. Ignacio Escuín, contribuyo también a ello. Era amena y pedagógica. Espero aprender poesía actual.

          La del comandante de puesto de la guardia de Hijar, encuentro que cayó muy bien entre los asistentes porque supo explicar el tema de la seguridad de forma llana. A mí no me instruyó mucho porque ya he asistido a otras charlas parecidas, dadas por algún responsable de la Policía nacional en alguna asociación de vecinos o sede sindical. Lo mismo podría decir de los bomberos sobre seguridad y prevención en el hogar. Ambas estuvieron bien y creo que necesarias sobre todo para las personas mayores, y también para los jóvenes, siempre que no se caiga en la obsesión por la seguridad y el miedo a los forasteros.

          La charla de Fidel Falo Montañés, que como sus apellidos indican también es de Samper, nos ofreció una charla interesante sobre un tema que debemos estar cada vez más al día: “Enfermedades ligadas a la alimentación”.

          Me sorprendió positivamente Ángel Secanella con un tema de psicología a la que soy aficionado. Su punto de vista y el de su asociación, A.D.A.P.A., bastante racionalista, me gustó, porque ahora lo que se vende es la parasicología, el esoterismo y las pseudociencias.

          Bien la conferencia de D. Segundo Bordonaba, presidente de la RUTA; le iba a preguntar por el nombre real de la RUTA, pues lo veo escrito de varias maneras y la que veo actualmente no creo que es con la que se registró; pero pensé que no venía al caso. Igual estoy confundido.

          Joaquín Sanz, de manera amena y entretenida nos ilustro sobre un tema muy serio “Salud y nuevas tecnologías”. Las nuevas tecnologías no pueden aplicarse sin tener en cuenta “el principio de prevención”, como se debe hacer con los medicamentos nuevos. Me parece que por asuntos económicos hay mucho oscurantismo por parte de las autoridades que demuestran una gran irresponsabilidad. El tema se presta también a ser abordado desde posiciones fundamentalistas e irracionales pero no fue el caso de la conferencia que nos ofreció Joaquín Sanz.

          Y por último, como viene siendo tradicional un pase de cortos premiados en festivales de España, con la colaboración de la Asociación de Los Tambores y la C.C. O.N.G. Ayuda al Desarrollo. Lástima que las 21,30 horas no son las más indicadas para facilitar la asistencia del público; sobre todo después de otras dos charlas. Sería conveniente facilitar una hora más adecuada, digo yo, si es posible.

          Bueno, hay otros temas más, la cena de vecinos a la que apenas pude acudir porque tenía que ver el Barça-Sevilla y además no había aportado nada de alforja y no creía oportuno ir a picar, que al final piqué, pero poco.

          Afortunadamente en el encuentro deportivo hubo menos conflicto de banderías y política que en el pleno del Ayuntamiento del pasado jueves. Este fue algo movido, como si formara parte del programa de fiestas, Yo salí triste, aunque luego recapacitando soy optimista; están todos obligados a quererse, vamos, no harán el “pacto del botellín” como el de Pablo Iglesias y Alberto Garzón pero casi. A la corta o a la larga el PAR-PP y PSOE se reconciliarán; en un pueblo tan pequeño como Samper hay poco recorrido para los antagonismos políticos. Salí del pleno sabiendo algo más; por ejemplo que el secretario llevó un buen rapapolvo por parte del alcalde y se auto acusó, el secretario, de ser el culpable del retraso en presentar las cuentas y en el retraso en convocar los plenos municipales. Lo demás “y el tú más”. Los forofos de cada partido salieron como entraron; echándole la culpa al árbitro y a las faltas del equipo contrario.

          Falta las jotas del jueves que habrá que verlas y la romería; con una duda: ¿estarán buenas las judías de la romería este año? Me ha dicho el perro de Santa Quiteria (el de ahora, no el antiguo de plata que nadie sabe dónde está), que estarán este año de rechupete. Así que a disfrutarlas.