jueves, 13 de agosto de 2015

Comentario. Nuestro vocabulario.

Pinchar
          Últimamente aparece por Facebook (Samperinos por el mundo) el interés por nuestra habla peculiar, bien la que todavía se habla, la que se habló pero que todavía queda en la memoria colectiva o la que aún se conserva. Recomiendo dos libros; el primero se trata de un facsímil editado por el Centro de Estudios del Bajo Martín, de Félix Monge y se titula: “EL HABLA DE LA PUEBLA DE HIJAR”.
Es muy completo y docto aunque sencillo de leer, y decir de La Puebla de Hijar en cuestión de “habla”, es como decir de Samper de Calanda.
          El segundo, es el libro de Alejandro Abadía París, Titulado: “SAMPER DE CALANDA, TRADICIONES Y COSTUMBRES”. todavía queda algún ejemplar en la tienda de “Tomás”. Además de sus interesantes artículos que nos hablan de tantísimos motivos; de nuestras leyendas y costumbres, al final del mismo hay un interesante vocabulario local.
          Por ejemplo, solo unos pocos: ababol, abarcar, abiar, abiaruelo, aciprenar, agora, aguarte; bación, badina, beturracio; cachuelo, carambelo, coda, colgallo; chaminera, charrar; dalla, desucau, diñar, dorondon; emporcar, empentar, embastar, escobar; fajina, falcino, farinetas, fardacho; garrofa, gralla; higote (antiguamente figote); inte, intayer; jada, jorear, juagar; lambreño, lamin, lifara; llegar (recoger), masadería; naide, nierbos, niquitoso, noguera (los áboles se les nombraba en femenino), ñudo; orache, ospen; panolla, pansas, puncha, purna; quera, quió; raboso rader, remugar; sargantana, somarda, sorollar; tajugo, tarambana, trasegar; zaborra, zenacho...

No hay comentarios:

Publicar un comentario